Sobre Soberania Maritima II

En el articulo “Sobre Soberanía Maritima I”[1] planteamos la necesidad de aumentar la presencia soberana en nuestro mar y mas específicamente en la ZEEA. Y planteamos también, que para ello la solución es sencilla y compleja al mismo tiempo, y que la misma pasa por aumentar la cantidad de barcos realizando actividades diversas.


Ahora imaginemos un país de índice de desarrollo humano bajo, es decir, un país pobre y con un nivel de desarrollo económico, científico y tecnológico y social también bajo.

 

 Imaginemos que ese país es el que no disponiendo de demasiados recursos económicos, ni científicos, ni tecnológicos, ni humanos, debe hacerse de múltiples naves para realizar actividades que hacen a la custodia de su soberanía marítima. Ese país no tienen muchas mas opciones que endeudarse para comprarle a países de mayor nivel de desarrollo las embarcaciones necesarias para los diferentes fines.

 

Ahora trasladémonos a la Republica Argentina, ¿es la única vía el endeudamiento y adquisición en el exterior de las embarcaciones necesarias?, ¿no tenemos capacidades suficientes en el país para la fabricación de las embarcaciones necesarias?.

 

Desde este espacio creemos que si, que disponemos de las capacidades necesarias para producir nuestra flota.

 

En principio nos permitiremos mencionar capacidades que podemos fácilmente identificar sin pensarlo en términos sistémicos, pero agrupándolas de la siguiente manera.

 

Capacidades de producción de materias primas y bienes intermedios.

 

Capacidades disponible en infraestructura y equipamiento.

 

Capacidades en recursos humanos y conocimientos.

 

Capacidades de desarrollo de nuevas capacidades.

 

Cualquier nación que disponga de estos cuatro grupos de capacidades desarrolladas tendrá lo posibilidad de desarrollar diferentes procesos productivos industriales, y en este caso, lo que nos interesa, es abordar la industria naval.

 

En relación al primer grupo de capacidades, en principio pero no excluyentemente podemos pensar en que las principales materias primas a usar en la industria naval son acero, aluminio y energía. No solo disponemos de esas materias primas en principio en los complejos industriales del grupo Techint, aluar, YPF, así como en distintas empresas de generación, transporte y distribución de electricidad, tanto como en la distribución de gas, sino que de muchas de ellas, el estado directa o indirectamente es propietario de una parte del paquete accionario.

 

En cuanto al segundo grupo de capacidades, infraestructura y equipamiento en principio se podría pensar en cinco grandes complejos:

 

El primer complejo es el CINAR (Complejo Industrial Naval Argentino) compuesto por los astilleros Tandanor y Almirante Storni con amplia capacidad instalada e infraestructura para el abordaje específicamente de producción relacionada con la industria naval y sobradas capacidades relacionadas con el ámbito de la seguridad y la defensa marítima.

 

El segundo complejo es el de Astilleros Rio Santiago y las empresas satélites proveedoras de la primera con amplia capacidad de producción de embarcaciones de dimensiones considerables. También con experiencia en fabricación de buques militares.

 

El tercer complejo lo podríamos pensar en relación a todos los astilleros privados que hoy sobreviven en el país realizando diferentes tipos de trabajos tanto en construcción de embarcaciones como mantenimiento en general y que participarían gustosos de un plan de estas características.

 

El cuarto complejo lo compondrían todas las empresas públicas y privadas metalúrgicas y metalmecánicas con capacidad ociosa temporal o permanente dispuesta a realizar trabajos a pedido por una reactivada y floreciente industria naval.

 

Y el quinto y último complejo lo compondrían todas las empresas de alta tecnología públicas por ejemplo INVAP, los centros de investigación (INTI, CONICET), las Universidades Publicas (principalmente pero no excluyentemente las de ingeniería), todos los centros de estudio e investigación, formación y universitarios de las diferentes fuerzas armadas, fabricaciones militares, etc y todas aquellas instituciones con capacidad productiva que quisieran y pudieran sumarse al proyecto.

 

Sabemos que un gran talón de Aquiles de un proyecto de estas características es la falta de divisas para importación de tecnología sensible que no se produce en el país, en principio comunicaciones, radarización, etc; rubros en los que INVAP dio sobradas muestras da capacidad, eficiencia, eficacia y profesionalismo.

En relación al tercer grupo de capacidades recursos humanos y conocimientos, tenemos cientos de trabajadores con amplias trayectorias trabajando en astilleros públicos y privados; tenemos cientos de ingenieros de diferentes especialidades graduándose anualmente de los cuales varios son ingenieros navales; tenemos miles de técnicos de secundario recibiéndose anualmente en diferentes especialidades que son el escalón fundamental sobre el que se asentaría cualquier  proyecto industrial. Y no esta de más decirlo, es muy probable que al día de hoy tengamos cientos de ingenieros y decenas de miles de técnicos trabajando en otras actividades que no son las relacionadas con su área de estudio y muy posiblemente, los técnicos de mas reciente graduación, desocupados.

 

El cuarto grupo de capacidades coincide con el quinto complejo del segundo grupo de capacidades y es la reserva de conocimiento y capacidad de aprender de nuestro pueblo, el complejo, diverso y siempre criticado sistema educativo con todas sus escuelas técnicas, universidades y centros de investigación.

 

Hoy estamos inmersos en un dejar hacer del investigador y del docente universitario y secundario que nos posiciona correctamente en cuanto a libertad de cátedra y de investigación a nivel mundial, pero, ¿es útil a un proyecto de desarrollo?. ¿En qué medida una sociedad debe dejar librado al azar y al buen tino de sus investigadores y académicos su modelo de desarrollo?.

 

O dicho de otra manera, no sería útil ¿trazar ejes de desarrollo para que quienes quieran trabajen en pos de un proyecto de desarrollo industrial trazado a largo plazo?.

 

Hay discusiones que como sociedad evitamos dar, no inocentemente, agazapados detrás de los más “nobles argumentos” se encuentran los peores intereses esperando se abran ciertas puertas para adoctrinarnos sobre las perjuicios de desarrollarnos y crecer, pero la temática excede el presente.

 

Las capacidades mencionadas están demostradas al verificar que por ejemplo las seis corbetas multiproposito MEKO 140 fueron construidas bajo licencia en Astilleros Rio Santiago, así como la reparación de media vida del Submarino tipo TR-1700 Ara San juan se realizó en la planta de submarinos del complejo CINAR.

 

Y en esta parte es donde surgen los grandes interrogantes de los cuales abordaremos algunos en futuros artículos.

 

¿Por qué teniendo todas las capacidades necesarias no damos inicio a la reactivación de nuestra industria Naval?.

 

¿Porque disponiendo de recursos públicos y privados no los movilizamos para llevar adelante una empresa de tamaña importancia y magnitud como es la explotación de nuestros recursos y la custodia de nuestra soberanía?.

 

¿Cómo se llega a una situación de inacción en la que tenemos infraestructura ociosa, equipamiento ocioso, mano de obra especializada ociosa, trabajadores desocupados, barcos por construir, recursos marítimos por explotar, Argentinos y Argentinas con hambre y/o mal nutrición, y no hacemos nada para movilizar una oferta de recursos disponibles para acercarla a una demanda latente de necesidades básicas insatisfechas?.

 

El subdesarrollo en estos términos pareciera ser un estado en la mente….Nos convencieron a la mayoría del Pueblo Argentino de que dejar hacer al mercado es la única opción posible.

 

Las inversiones extranjeras vendrán, y el desarrollo sucederá.

 

Contra esa gran zoncera de la inferioridad de lo criollo y la dependencia de lo extranjero, tenemos que batallar incansablemente.

 

[1] Documento web: https://integracionydesarrollo.ar/soberania-y-geoestrategia/, recuperado el 05-07-2020.

Sobre Soberania Maritima

En los últimos meses se hizo viral un video1 en el que el capitán de un buque pesquero de bandera Argentina mostraba como su radar evidenciaba casi cien embarcaciones pescando ilegalmente al límite de la ZEEA (zona económica exclusiva de la Argentina).

Esto ocurre dada la falta de recursos de los que dispone la Prefectura Naval Argentina en tanto fuerza de seguridad encargada del patrullaje y la custodia de nuestro territorio marítimo y la falta de recursos de la Armada en tanto fuerza que puede brindar apoyo a la primera, para cumplir con sus funciones.

Tanto la cuestión de la pesca ilegal como la falta de recursos de las fuerzas encargada de patrullar y prevenir dicha pesca ilegal son conocidas desde hace años.

E implica lisa y llanamente una cesión de soberanía en sentido amplio. Esta cesión de soberanía, decimos que es en sentido amplio, pues no podemos tener la certeza de que no hay embarcaciones militares de otros países realizando actividades no autorizadas; no podemos tener certeza tampoco que no hay embarcaciones ilegales realizando actos de piratería, así como no podemos tener certeza de que no se este pescando ilegalmente en nuestro mar.

No obstante, si hay algo de lo que tenemos certeza, y es de la depredación de diferentes recursos (pesqueros en principio) en forma ilegal en nuestro mar en los límites de la ZEEA (Zona Económica Exclusiva Argentina) tanto como que no tenemos las herramientas para evitarlo.

La superficie continental de nuestro país es de poco mas de 2,78 millones de km2, pero es preciso no olvidar que el territorio marítimo de la ZEEA (Zona económica exclusiva Argentina) es de mas de 800.000 km2.

La solución en principio seria sencilla y compleja al mismo tiempo, necesitamos mas presencia en el océano atlántico. Y esta presencia no es ni mas ni menos que tener mas naves circulando y realizando tareas diversas.

Necesitamos tener más naves que realicen actividades de:

Pesca de diferentes especies bajo la planificación y el control de las autoridades competentes.

Transporte y comercio.

Patrullaje y vigilancia.

Científicas que lleven adelante estudios, relevamiento e investigaciones.

Aprovisionamiento de las actividades antes mencionadas.

Si de lo que estamos hablando es de la custodia de nuestro territorio, necesitamos en ello ciudadanos comprometidos y más presencia, de ello surge la necesidad de que haya naves de comercio, pesca, transporte, investigación y logística circulando por la ZEEA para facilitar la custodia y control de nuestros recursos.

Nadie que se precie de querer cuidar la soberanía de su territorio deja vastos espacios despoblados y sin actividad.

Claramente pensamos que debería constituirse una empresa de transporte y pesca estatal, o mixta con mayoría accionaria estatal a fin de cumplir con algunas de las tareas antes mencionadas. El Conicet, junto a las universidades nacionales y otras instituciones como INTI, INTA, Ministerio a cargo de las actividades de pesca, ANMAT etc podrían encargarse de las actividades científicas, prefectura de patrullaje y armada de aprovisionamiento en particular y logística en general.

Solo necesitamos………..mas embarcaciones.

Nos permitimos hacer un paréntesis en la temática desarrollada hasta ahora y tomar algunas ideas desarrolladas en los artículos “Prologo de una propuesta”2 y “El ofertismo como regla y vicio”3 publicados oportunamente en este espacio y que resultan de utilidad para este desarrollo.

En ellos planteábamos algunas problemáticas que a esta altura no podemos negar que son estructurales y endémicas de nuestra sociedad, y estas son.

1.- Tenemos amplios sectores de nuestra sociedad excluidos sometidos a indignantes niveles de pobreza, indigencia y exclusión.

2.- Tenemos un problema de falta de empleo o precarización del mismo que alcanza a amplios sectores sociales.

3.- Tenemos amplios sectores de nuestra sociedad con hambre y/o mal nutrición.

4.- Tenemos recursos ociosos de todo tipo que podrían tender a solucionar los problemas anteriormente mencionados.

5.- Esto se debe a un problema básicamente logístico en los términos que fue descripto en el artículo “El ofertismo como regla y vicio”, es decir estamos lejos del óptimo de uso de recursos de los que disponemos.

El potencial de la riqueza ictiocola de nuestra ZEEA es gigantesco. Esto ayudaría a subsanar el problema del hambre en nuestro país así como aumentar la oferta de alimentos en el mercado interno tendiendo a morigerar el problema de precios de alimentos.

El potencial de generación de empleos directos e indirectos en la industria naval tanto como la capacidad de emplear gente de una nueva empresa de transporte y pesca estatal, es considerable.

Debemos comenzar a pensar críticamente como evaluamos ciertas decisiones de gobierno y que esperamos de dichas decisiones en tanto ciudadanos concientes de nuestros intereses y de los de la nación.

Hoy día a falta de embarcaciones especializadas para patrullar la ZEEA esta tarea la esta realizando entre otras el Destructor Clase Meko 360 H2 ARA “La Argentina” de la armada.

Sino tenemos otra opción esta bien, pero lo cierto es que necesitamos con la mayor urgencia posible disponer de embarcaciones de patrullaje adecuadas, tener un destructor realizando esas tareas es tan absurdo como pensar que estaba realizando las mismas tareas de patrullaje para evitar pesca ilegal el Submarino ARA San Juan cuando implosiono.

De igual forma resulta absurdo que la prefectura naval Argentina tenga una guardia de infantería completamente equipada y autotransportada para reprimir manifestaciones y no tenga embarcaciones para patrullar nuestro mar.

Un destructor es un barco de guerra, diseñado para operar contra diferentes tipos de amenazas, cuenta en su arsenal con un cañón de 140 mm, 4 montajes para cañones de 40mm, 2 lanzadores de misiles exocet, 1 lanzador de misiles selenia/elseg albatros, 2 lanzadores triples de tubos lanzatorpedos. Por otro lado es una embarcación pesada pensada para perseguir y combatir otras embarcaciones pesadas y posee una tripulación de 200 hombres.

No hace falta ser un experto para darse cuenta que es una nave cara, cuyo desplazamiento y uso es caro y que no esta pensada para perseguir pesqueros; de toparse con uno, ¿que haría?, ¿hundirlo con un torpedo o un misil?.

Debemos cuanto antes movilizar todos los recursos de los que disponemos para construir las embarcaciones que necesitamos para patrullar, explorar y explotar nuestros recursos marítimos.

Ese es uno de los grandes desafíos que tenemos para consolidar el control soberano de nuestro territorio.

1.-Documento web: https://www.youtube.com/watch?v=74WqiV8HVRw, recuperado el 20-05-2020.

2.-Documento web: https://integracionydesarrollo.ar/logistica/, recuperado el 31-05-2020.

3.-Documento web: https://integracionydesarrollo.ar/economia/, recuperado el 31-05-2020.